El gimnasio.

EL GIMNASIO.

“Las apariencias colocan a cada uno en su lugar”

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         Si usted puede asistir a un gimnasio será de gran importancia. La idea es que comience dos días por semana, de media a una hora cada vez, y luego de unos dos meses pasar a tres días por semana, también aproximadamente una hora a hora y cuarto cada vez que va. En este punto, casi le aconsejaría, mantenga siempre la asistencia. No abandone en invierno y recomience en primavera. Y por supuesto no abandone las caminatas. Es caminar más gimnasio.

         En todo caso disminuya un par de días las caminatas y agregue el gimnasio. La idea es que como mínimo usted dedique una hora diaria al ejercicio físico. Y si le va gustando hasta una hora y media. O podría, ir temprano al gimnasio y al mediodía o a la tarde a caminar.

         Usted dirá que no se puede dedicar todo el día al ejercicio y puede tener razón. Pero no estoy diciendo todo el día. Estoy hablando de una hora y media por día. Y el día tiene 24 horas así que saque cuentas. Es su mejor inversión diaria. Aunque todo depende de la familia que tenga y del trabajo que realice. Si es empleado desde ya que todo se complica pero inténtelo utilizando también los fines de semana y los feriados, o cualquier día antes de ir al trabajo levantándose una hora y media antes. Si es autónomo puede encontrarle mejor la  vuelta. O quizá es jubilado y tiene todo el tiempo del mundo.

         El gimnasio le va a permitir transformar grasa en músculo. Porque con lo que hemos hecho hasta aquí, dieta y caminata, podremos haber bajado un poco o mucho de peso y recobrado algo de agilidad. Pero, si bien es importantísimo lo que hizo,  y obligadamente tenemos que empezar por allí, el paso siguiente es modificar en parte el cuerpo y lograr una forma más armónica. El gimnasio nos puede ayudar mucho en ese sentido.

         No debe confundir el gimnasio con un lugar de entrenamiento exclusivo para quienes cultivan el físico. No. Al contrario. Si bien asisten jóvenes, y no tanto, dedicados principalmente a la musculación, la mayoría va con el propósito de mejorar su estado físico dentro de parámetros menos exigentes.

         Todos los gimnasios tienen un Instructor, un Profesor de Gimnasia, que le indicará una rutina de ejercicios de acuerdo a su estado. Debe saber que esta rutina se va a ir modificando en el tiempo, pero muy de vez en cuando. Cuando el Profesor vea sus progresos seguramente le modificará su rutina. No desespere. Pueden pasar dos meses o más hasta que le cambien algo. Pero sea disciplinado y constante que vale la pena. Tampoco crea que no le están prestando atención. Los gimnasios están llenos de espejos y usted está siendo observado.

         Generalmente conviene comenzar el trabajo  con  quince minutos de bicicleta fija o cinta para efectuar un calentamiento. Las bicicletas fijas tienen un freno para aumentar el esfuerzo de las piernas. No se exija demasiado. Que el pedaleo sea cómodo. Ni excesivamente liviano ni muy pesado. No está compitiendo: está precalentando y con moverse y un poco de esfuerzo alcanza.

         El Profesor le indicará las series y repeticiones de cada ejercicio. Generalmente son tres o cuatro series de ocho o doce repeticiones cada una. Una vez que usted haya ido una o dos semanas al gimnasio, y dado que el Profesor una vez que le indicó los ejercicios no estará más con usted, debe ir tratando de a poco de aumentar los pesos de cada ejercicio. Si empezó con 20 kilogramos por ejemplo, y hace cómodo la serie de doce repeticiones, aumente 5 kilogramos. No en todos los aparatos puede incrementar los pesos en la misma medida porque trabajan distintos músculos. También podría aumentar las repeticiones a 15. O puede aumentar de tres a cuatro series, la primera de 15 repeticiones, la segunda de 14, la tercera de 13 y la última de 12. Porque a medida que pasen las series los músculos se irán cansando y entonces regula haciendo menos repeticiones.

         Entre repeticiones debe recuperarse. Debe descansar. Generalmente es un minuto. Puede contar sesenta. Es el tiempo que tardan los músculos en recuperarse. También puede caminar un poco y volver al aparato que está usando. Usted también puede hacer dos series en un aparato y hacer dos en otro. Luego vuelve al primero y completa las cuatro series y regresa al segundo y hace lo mismo. Así también podría hacer otras combinaciones. Esta alternancia es interesante, especialmente hacer dos repeticiones en un aparato donde el esfuerzo es en brazos y alternar con dos repeticiones donde el esfuerzo es con las piernas.

         Los aumentos en la exigencia del aparato los debe regular usted. No se exija demasiado. Aumente de a poco. Recuerde lo siguiente: si usted quiere desarrollar músculo por sobre todas las cosas, conviene hacer menos repeticiones con mayores pesos y alternar. Si usted quiere que el gimnasio le sirva primordialmente para bajar de peso y además para transformar grasa en músculo, conviene hacer mayor cantidad de repeticiones con menores pesos. Para no confundirse convendría que los esfuerzos requeridos le permitan hacer entre 10 y 12 repeticiones, y sobre esta base, ir aumentando los kilos. Si tiene dolores musculares deberá bajar la intensidad del ejercicio. El cuerpo manda.

         Naturalmente no mire lo que hacen los demás. Usted mantenga la rutina dentro de sus posibilidades. Ya mejorará. Pero las mejoras llegan luego de semanas y meses.

         Las rutinas entre bicicleta fija, abdominales y 8 a 10 ejercicios o estaciones (aparatos) más le llevarán  alrededor de una hora toda la vuelta. Incluido las recuperaciones.

         Si usted puede asista en un horario que no esté tan concurrido para no tener que disputar aparatos y dar su vuelta con comodidad y a elección. Si no está solo, que en general será así, deberá ir liberando el aparato para que lo utilice otro compañero. Esto le permitirá ir alternando aparatos lo que es interesante para principiantes. El circuito que está haciendo un día conviene modificarlo al próximo. Es una manera de sorprender a los músculos. Estas modificaciones en el orden que hace los ejercicios generan una respuesta positiva en los músculos. Su instructor le dará una hoja de ruta.

         Las pesas, colchonetas o aparatos que utilice debe volver a dejarlas en su lugar o como se encontraban. El orden es parte del ejercicio. Aunque otros no lo hagan, hágalo usted.

         La actividad con aparatos tiene la virtud de eliminar grasa y generar más músculos. Pero, además, le mejorará la postura y el andar. Y el día que asiste al gimnasio también sirve para reponer alguna falta en su caminata.

         Recuerde que los resultados los irá viendo a través de los meses. Nada es inmediato. Pero están ocurriendo. Milimétricamente pero están ocurriendo. Ni se sobreestime ni se subestime. Usted es único: no imite ni crea que lo van a imitar. Le recomiendo paciencia, orden y humildad: no pretenda mostrarse. Cuánto más disimulado mejor imagen.